viernes, 6 de marzo de 2015

A PIE PARADA MIRANDO NADA

Tengo 62 años. Aquí solo véis mi edad mental
A pie parada mirando nada. Bueno sí. Me miro en el espejo y  me gusto. Me gusta esa sonrisa cínica que aireo en entrevistas incómodas. Es el mejor aval de mis mentiras. Los pliegues de la frente, mojados por pequeños hilillos de sudor, hablan de mí. El brillo de mis ojos  tiene un extraño destello de noches en vela y días de excitación  mediática. Me apuntan los discursos en el mismo rollo que uso cuando me siento en la taza. Desde hace mucho que cago con papel. Ya no lo hago de memoria. Me asusta pensar que sea incapaz de tener una sola idea que no me la encuentre apuntada. Doy gracias a dios de tener un pueblo como éste, que traga con todo. Menos mal que no tengo que esforzarme por buscar una lógica a mis palabras ya que sé que al otro lado nadie me escucha. Son máquinas de poner votos en urnas de metracilato. Son robots despertados, por wifi, con un click. Menos mal que están programados para mantener mi  discurso democrático. Imaginad que sean capaces de empatizar y de tener un sentido solidario de la vida. No soportaría estar sumida en un segundo plano. Estar sumida  a escuchar conversaciones ajenas porque nadie estaría dispuesto a escucharme. Qué desazón. Qué despilfarro de inteligencia liberal. Mi semilla está en todos vosotros. Mi virus está inoculado en esta  sociedad que volverá, y vuelve a mí cuando me necesita. Yo soy su madre, pero soy y puedo ser Tomás, Pablo, Juan Carlos, Pedro, Rosa, Susana, Floriano, Felipe, mi Enrique, Mariano o Jose María. Soy legión Soy todos. Estoy en mí y en cada uno de ellos y de vosotros por completo.
El espejo se ruborizó sin que se diese cuenta lo que había al otro lado. Lejos quedaban los tiempos en los cuales los cuentos daban sentido a sus reflejos. Ahora, si pudiese llorar, lo haría. Alguien bienintencionado pensó que la esperanza es lo último que se pierde. El espejo, antes de fundirse en negro, creyó con firmeza que la Esperanza debería ser lo primero.



ST. PAUL & THE BROKEN BONES - CALL ME
De  HALF THE CITY (2014)

Grupo formado en 2012 con siete sujetos de Alabama dándole duro al soul más sudoroso. La  garganta de su orondo líder Paul Janeway  enama alientos de  Sam Cooke y Otis Reading sudando la camiseta, en este caso el traje, sin ningún pudor.
Sorprende la compacta madurez de su sonido  en una grabación que, perfectamente se pudo haber grabado sobre 1967 en el muelle de  alguna bahía. Mientras tanto, en este país hay gente como Freedonia, The Excitements o The Pepper Pots apto solo para incondicionales de negritudes rítmicas. Sale más a cuenta promocionar al Bustamante y a su verbo florido. ¡ Dónde va a parar !




Llámame.
Este no es el corazón
que creí conocer.
Esta no es la fiesta
en la que te encontré