miércoles, 7 de abril de 2021

UNA VACUIDAD EXISTENCIAL O PENSANDO SOLO EN LO ÚNICO MISMO

Hay gente, antes personas, tiradas en las calles  con jeringuillas clavadas en los hombros y sobre estos, cabezas  con  espasmódicos rostros de placer. Tal vez pasaron el límite y tuvieron un mal viaje a la nueva normalidad. Pudieron elegir y optaron por todas: europeas y asiáticas. Asaltaron hospitales, estadios y dispensarios con violencia. “Píncheme jodeputa. La  Faiser en un lado y de la Moderna en otro. Hostia ya” “La Astrohúngara esa me la llevo por si me da el mono”. Estas escenas habituales abrían telediarios y se tomaron cartas en el asunto. Los antivirales  ya se vendían en máquinas expendedoras con  instrucciones sucintas para el “hágalo usted solo que no es gilipollas”.  Su coste  era ligeramente inferior a la de cualquier mascarilla quirúrgica. Naturalmente, la incidencia bajó estrepitosamente.

Ponernos  la vacuna sería redundancia ¿No?

 

Cuando desperté de este alterado sueño, el T.Rex todavía estaba ahí. Mis manos temblaron y el persistente cansancio no me permitió pensar con claridad. En la televisión adoré a los mismos tertulianos con sus cultivos de esputos. La misma irritabilidad enamorada y aislado nerviosismo que tantos meses atrás  me pasaron una  factura de ansiedad e inquietud ahora asomaron por otros motivos.
  

Hoy me llegó la muñeca. Rubia, suave y sintética con un gran cráter debajo de la boca. Por fin. Cuatro meses de espera tiene que merecer la pena. Joder con  la mensajería y las aduanas. Juró que a ésta no la pincha ni Dios.

 

 

 

MORGAN - PLANET EARTH

DE AIR (2018) 

La banda madrileña es un paradigma de  contracorriente de la escena musical. Muchos llamados indies se cargan de seria banalidad para justificar su aburrida modernez. Morgan es otro rollo. Funden, compedian y asimilan lustros de influencias y texturas musicales en cada tema. La voz de Nina transciende y ennoblece el  arte de hacer canciones y tocar bien. Muy bien.  Sus tres discos ( el último en directo en el Price)   son piezas esenciales de bellas rarezas en los tiempos que corren . Por cierto, nos gustan más en inglés que en castellano. Es problema nuestro nada más.