jueves, 7 de enero de 2021

UNA MUTACIÓN CONVIVIENTEMENTE ALLEGADA


Conviviente y allegados sin mascarilla ni distancias: MUY MAL
Secuenciando el genoma del virus se ha visto que la mutación no ocurre en él sino en nosotros mismos. Ahora somos un 70% más gilipollas frente a las explicaciones del hijo del Emérito en Navidad. El rey de la obviedad siempre gana. Siempre habrá alguna bandera que intente inútilmente tapar una vergüenza que no existe. El horizonte nuevo  vacunil nos hace que ya empecemos, antes de tiempo, a limpiarnos el culo con las mascarillas y hacer nuestros cunnilingus y fellatios sin FFP2 alguna. No entendemos que, a lo mejor, la última palabra, conviviente o allegada, no está dicha. 

 

El nuevo año traerá nuevos expertos mediáticos que, emocionados, asesorarán a la población en el noble arte de la inanidad mental. Alguna alerta de  efectos secundarios reales o ficticios intentará mantenernos en nuestros cubículos más tiempo o no.  Placebo o realidad. A saber.

Seguirán los buenos tiempos convulsos para  desviar corrupciones monárquicas  varadas en tiranías pérsicas hediondas.

El primer discurso  navideño de Juancar sigue todavía más vivo que nunca. ¡Hay que joderse!

 

  "El año que finalizamos ha dejado un sello de tristeza, que ha tenido como centro la enfermedad y la pérdida del que fue durante tantos años nuestro Generalísimo. El testamento ofrecido al pueblo español es sin duda un documento histórico que refleja las enormes cualidades humanas y los sentimientos llenos de patriotismo sobre los que quiso asentar toda su actuación al frente de nuestra nación". 

 El Emérito  1975

 Nuestro virus empezó ahí. Una campechana  y entrañable mutación