DIARIO DE UN JOVEN PREJUBILATA

DIARIO DE UN JOVEN PREJUBILADO

PRÓLOGO

Yo no soy él aunque, pensándolo bien, me gustaría. Ahora, él afrontará una nueva vida.A veces, creo, se sentirá un poco achatarrado por ser apartado de la inmundicia del trabajo. Ahora toca mirar a la vida cara a cara y,  exprimir la poca o mucha sabiduría que quede en ella.
Hay que mirar atrás. Ver y sentir lo bueno y malo de los sacrificios y recoger sus frutos. Él sabe que es una gran oportunidad de cambio y, como tal, hay que adaptarse a ella. El mundo se observará desde otra perspectiva. Opinará sabiendo que, realmente, le importa una mierda el Guindos, el Wert y la babosa de Cospedal. Ahora luchará por todas la cosas que, realmente, merecen la pena: Esos momentos grabados en la memoria vuelven a florecer porque, hay que reescribir las líneas de la vida que, en el devenir laboral, se
pudieron difuminar un poco. Se reescribirán los sentimientos que no  las ideas. Ahora hay que combatir a la pereza y a la desesperanza. Es una situación de manos a la obra y agitar corazones. 

Cuando ya no tengamos edad penal,  quemaremos la Bolsa y  los ministerios. Defecaremos en La Zarzuela ante un nutrido grupo de periodistas porque ,nos llena de vergüenza y estupor nuestra calidad de no-vida. Daremos las gracias, a los patrones y gobernantes, por habernos dado  un sueldo todos los meses por un trabajo que, realmente, nos importa una  mierda como un centollo. Es un puto intercambio sin más. Pero,ahora sí. Ahora La Merkel,FMI, PIB, CNMV, SGAE, IRPF, BCE... pueden todos ir dirigidos a un mismo orto llamado Europa.

         Por todo eso, quiero escribir las primeras líneas del diario del resto de tu vida:

"Querido Diario:
Hoy me he despertado a las seis de la mañana. He mirado de reojo al despertador. Le he hecho un corte de mangas y me he dado la vuelta...."