A oscuras, Petra se transformó en La Gárgola. Acercó su aliento a la cara de Celedonio y le introdujo su lengua viscosa en la garganta.
Después,le desnudó con sus enormes garras y poniendo su castaña pilonga, de nuevo, en los morros de Celedonio le dijo:
-Mira qué depiladita estoy
-Petra ¿qué haces?-Cele apenas podía decir nada con la boca llena.
Así era como la Gárgola extraía las voluntades de sus víctimas.
Celedonio ya jamás se negaría a ningún capricho de Petra. Incluso ella le llegó a exigir:
- Cele.¡Quiero un hijo tuyo!
Él, le cedió en adopción uno de cinco años fruto de un matrimonio anterior.
Después de la transacción, al mes, Celedonio apareció muerto en un contenedor con el estómago abierto y semidevorado por las ratas.
La versión oficial se quedó en que fue un suicidio premeditado por el comportamiento errático del Fondo Monetario Internacional.
Petra sabía que no fue eso. Ahora disfrutaba plenamente de un chalet en Colmenar de Oreja,un pisito en propiedad en el extraradio y un mocoso llamado Evaristo que no hacía más que olisquear a La Gárgola...
Continuará...
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